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  • Mova: Una Nueva Visión Residencial Para Recoleta, De La Mano De Singular Desarrollos

    Con una propuesta que combina diseño contemporáneo, funcionalidad y sentido de comunidad, Singular Desarrollos lanza Mova, su primer proyecto en Paraguay, apostando por la consolidación de Recoleta, un polo residencial en crecimiento. Con el inicio formal de las obras del Edificio Mova, la desarrolladora chilena Singular marca su entrada oficial al mercado paraguayo con una propuesta arquitectónica que busca redefinir el concepto de vivienda urbana en Asunción. El evento, que reunió a directivos de la empresa, clientes, socios y representantes de la reconocida constructora Benítez Bittar, simboliza el comienzo de una apuesta estratégica que combina experiencia internacional, sensibilidad local y un claro enfoque hacia el segmento premium del mercado inmobiliario. Singular Desarrollos no es nueva en el oficio de construir ciudad. Con más de 20 años de trayectoria en el mercado chileno y más de treinta proyectos ejecutados, su desembarco en Paraguay responde a una evaluación cuidadosa del potencial que ofrece el país para desarrollos inmobiliarios de alto estándar. Paraguay se presenta como un destino cada vez más atractivo para la inversión extranjera, especialmente en el sector inmobiliario. La estabilidad macroeconómica, el bajo nivel de inflación, una moneda fuerte y una de las cargas tributarias más competitivas de la región, son solo algunos de los elementos que Singular considera diferenciales. A esto se suma un mercado que, en palabras de su CEO, Moshe Apt, recuerda en muchos aspectos al Chile de hace 25 años, lo que otorga una ventaja comparativa a quienes ya han recorrido ese camino. La elección del terreno no fue casual. Recoleta, y en particular la manzana delimitada por Dugarty y Cruz del Chaco, fue seleccionada tras un análisis detallado del crecimiento urbano reciente. El barrio, pese a estar perfectamente conectado con el resto de la ciudad, conserva aún rasgos de vida de barrio, con bares, restaurantes, movimiento peatonal. El edificio Mova fue concebido para integrarse a ese entorno con una arquitectura contemporánea, limpia, elegante y funcional. La propuesta apunta a un público que valora la estética, pero también exige practicidad, amplitud y espacios que permitan una vida más conectada con el entorno urbano. Grandes ventanales de piso a techo, layouts modernos y materiales de alta calidad son algunos de los elementos que definen la propuesta arquitectónica. Pero más allá de los detalles constructivos, el proyecto responde a una visión más amplia: redefinir el modo de habitar la ciudad en el siglo XXI. Para Singular, las nuevas generaciones están transformando la manera en que se vive. Hoy, los espacios comunes, la interacción con la comunidad y la posibilidad de combinar trabajo y vida personal dentro del mismo entorno, son aspectos fundamentales a la hora de elegir una vivienda. En este sentido, Mova propone una experiencia residencial integral, donde los amenities no son un complemento decorativo, sino parte esencial del concepto de habitabilidad. La planta superior del edificio fue diseñada como un espacio de encuentro y desconexión. Allí se ubican una piscina infinita, un área zen con jacuzzi, sauna y camarines, un gimnasio completamente equipado y un quincho de grandes dimensiones, tanto interior como exterior, con parrilla, bar y áreas de estar que promueven la sociabilidad entre vecinos. En el primer piso, el concepto de comunidad se refuerza con un espacio de coworking, adaptado a las necesidades del teletrabajo y las nuevas dinámicas laborales. En la planta baja y subsuelos se incorporan servicios que responden a hábitos contemporáneos: zona para paquetería, zonas de lavandería común, y cargadores para vehículos eléctricos. En cuanto a las unidades residenciales, el edificio contempla monoambientes de 39 m², departamentos de un dormitorio de 50 m² y unidades de dos dormitorios que alcanzan los 94 m². Todos los departamentos cuentan con cocinas integradas, balcones con parrilla y terminaciones de alto estándar. La propuesta está pensada para jóvenes profesionales, parejas y familias jóvenes que valoran un entorno urbano activo, pero que también buscan calidad de vida, seguridad y comunidad. El precio promedio de las unidades ronda los USD 1.600 por metro cuadrado, y los planes de financiación fueron diseñados con especial atención al perfil del comprador paraguayo. Existen dos modalidades: una de corto plazo, con 20 cuotas durante la construcción, y otra de largo plazo, que permite financiar la unidad en hasta 60 cuotas con intereses. Esta última opción busca facilitar el acceso sin exigir grandes desembolsos iniciales, manteniendo un balance entre calidad y asequibilidad. En términos de diseño, Mova es fruto de una colaboración entre arquitectos locales y el equipo central de Singular en Santiago de Chile. La obra conjuga elementos como el hormigón a la vista, la perfilería metálica y una volumetría cuidadosamente trabajada, que otorgan al edificio una impronta contemporánea pero atemporal. La intención es que Mova se inserte en la ciudad no como un objeto de moda, sino como un aporte duradero al paisaje urbano. La ejecución estará a cargo de la firma Benítez Bittar, con la que Singular estableció una alianza estratégica basada en valores compartidos: compromiso con la calidad, eficiencia constructiva y una visión de ciudad que prioriza el desarrollo sostenible y la integración urbana. Con 34 años de trayectoria en Paraguay, Benítez Bittar representa una garantía de experiencia local y excelencia técnica, claves para un proyecto que busca elevar el estándar del segmento residencial en Asunción. La finalización de las obras está prevista para abril de 2027, fecha a partir de la cual se proyecta la entrega gradual de las unidades. Para Singular, este no será un proyecto aislado. La intención de la compañía es continuar desarrollando en Paraguay, con una mirada de largo plazo y con el objetivo de convertirse en un actor relevante del mercado local. Aunque de origen chileno, la desarrolladora aspira a consolidarse como parte del ecosistema inmobiliario paraguayo, desarrollando proyectos pensados para el ciudadano local y aportando una visión enriquecida por la experiencia internacional. Mova no es simplemente un edificio. Es una declaración de principios sobre cómo se puede habitar mejor la ciudad. Es una arquitectura que se abre a su entorno, una propuesta que entiende las nuevas formas de vivir, trabajar y relacionarse, y una invitación a pensar en la vivienda no solo como un producto, sino como una experiencia de vida. En un mercado que se consolida y evoluciona, iniciativas como esta anticipan el perfil de una nueva generación de proyectos residenciales, más conectados, más conscientes y más humanos. Para más información completa el siguiente formulario y la desarrolladora se contactará con usted:

  • PRESTIGIO: El Concepto de Oficinas Corporativas en Asunción Redefinido por Gustafson & Asociados

    Con una arquitectura pensada desde la eficiencia y una infraestructura única en su tipo, PRESTIGIO se proyecta como el edificio corporativo más completo y visionario de Asunción. El edificio corporativo PRESTIGIO representa una nueva apuesta por la excelencia funcional, arquitectónica y operativa dentro del segmento de oficinas premium en Asunción. Desarrollado íntegramente por Gustafson & Asociados S.A., el proyecto nace con un objetivo claro: ser un hito en diseño corporativo, donde la eficiencia, la seguridad, la adaptabilidad y el confort sean componentes inseparables de una propuesta pensada para perdurar en el tiempo y responder a los más altos estándares internacionales. Ubicado estratégicamente en la intersección de cuatro calles —Santísima Trinidad, Coronel Alcides Basualdo, Dr. Raúl Heisecke Ferreira y Teniente Manuel Benítez—, PRESTIGIO se extiende a lo largo de una manzana completa, consolidando así una presencia urbana contundente y simbólica. La concepción del proyecto partió de una lógica poco convencional pero profundamente racional: comenzar el diseño desde las cocheras, para luego elevar sobre esa base sólida una estructura de oficinas optimizada en términos de orientación, iluminación natural y versatilidad operativa. Este enfoque deliberado implicó un importante desafío constructivo y estructural, ya que la conexión entre ambos bloques fue resuelta priorizando los valores fundacionales del proyecto por encima de consideraciones de costo o simplicidad técnica. Con la mirada puesta en los estándares internacionales, el edificio cumplirá con los requisitos necesarios para optar a la certificación LEED, consolidando su compromiso con la sostenibilidad, la eficiencia energética y el confort ambiental. Esta visión de largo plazo no es nueva para Gustafson & Asociados, una firma con cuatro décadas de trayectoria marcada por el desarrollo de emprendimientos visionarios y cuidadosamente administrados. La empresa no solo diseña, construye y comercializa sus desarrollos, sino que también permanece como copropietaria y administradora de los mismos, garantizando así la calidad en el tiempo, la excelencia en la postventa y una relación directa y sostenida con los usuarios. Uno de los aspectos más innovadores del proyecto es su sistema de estacionamientos. PRESTIGIO contará con más de seiscientas cocheras distribuidas en tres sectores independientes, cada uno con accesos diferenciados desde distintas calles del perímetro. Habrá una cochera tarifada para visitantes y público en general, otra para funcionarios, y una tercera de uso exclusivo para propietarios, ejecutivos VIP e invitados especiales. Todas operarán con un esquema rampante, atravesadas por un gran ojo central que otorga amplitud visual y espacial, facilitando la circulación y el acceso a los ascensores de cada zona. El concepto “Never Lost”, desarrollado para este emprendimiento, elimina la necesidad de buscar espacios disponibles: el diseño garantiza que el trayecto natural de entrada y salida los atraviese siempre. Las calles internas de 7,60 metros de ancho y los espacios de 2,75 metros promedio brindarán una experiencia de estacionamiento cómoda, intuitiva y eficiente. Cada grupo de cocheras contará con núcleos de ascensores propios. Los públicos llevarán directamente al salón de eventos y al palier de ingreso general; los de funcionarios tendrán acceso directo al lobby de oficinas, evitando así aglomeraciones en planta baja; y los VIP conectarán de forma privada y directa con las oficinas, mediante ascensores revestidos en madera, con amoblamiento refinado y tecnología de seguridad avanzada. Este sector contará además con un espacio exclusivo para choferes y personal de seguridad, totalmente amoblado, climatizado, con sanitarios y ventanales con vistas al exterior e interior del edificio. Fuera del horario laboral, más de 600 cocheras estarán habilitadas para uso general en eventos, facilitando el acceso cómodo y seguro al salón ubicado sobre el nivel de estacionamientos. La planta baja del edificio fue concebida como una plataforma de acceso segura, fluida y tecnológica. Un aplicativo inteligente permitirá definir distintos niveles de acceso y gestionar el ingreso de visitantes sin depender de controles burocráticos o barreras visibles. El personal de seguridad, estratégicamente ubicado en áreas ocultas, controlará visual y digitalmente todos los sectores del edificio mediante sistemas de cámaras, intercomunicación con ascensores y protocolos blindados de actuación. La infraestructura incluye áreas de control interconectadas con salidas disimuladas hacia distintos puntos del edificio, garantizando capacidad de respuesta sin exponer los recursos de seguridad. En el extremo más destacado de la planta baja se proyecta un local comercial de gran escala, rodeado de jardines y áreas verdes, con vidrieras de piso a techo que recorren toda la cuadra. Su acceso estará integrado al palier principal del edificio, y podrá adoptar los mismos estándares de seguridad corporativa que las oficinas. Además, se dispondrán depósitos logísticos, un montacargas de gran capacidad (2,5 x 3 metros útiles) y áreas de carga y descarga con ingreso independiente para camiones, sin interferencia con el resto del flujo vehicular. Este soporte estructural permitirá realizar mudanzas, ampliaciones y equipamientos incluso en horario laboral sin afectar el normal funcionamiento del edificio. En cuanto a las oficinas, PRESTIGIO se destaca por la calidad espacial lograda a través de una cuidadosa orientación y diseño arquitectónico. La premisa de “ventanas siempre abiertas” permitió maximizar la iluminación natural sin comprometer el control solar, gracias a una envolvente con muros dobles y parasoles realizados con estructuras tensadas torsionadas, que no solo regulan el ingreso de luz sino que definen una fachada única, dinámica y elegante. Esta configuración hace posible crear oficinas con doble altura, otorgando amplitud, vistas abiertas y una diferenciación jerárquica para los niveles superiores. Cada bloque está conectado internamente mediante escaleras privadas y ascensores públicos y VIP, lo que brinda flexibilidad para unificar espacios o subdividirlos según la necesidad operativa del ocupante. Las oficinas incluirán baños sexados tipo club y accesibles desde el lobby, así como núcleos sanitarios para personas con discapacidad. Esta distribución libera la planta para permitir al diseño interior mayor libertad creativa y eficiencia en la densidad de ocupación. Adicionalmente, será posible incorporar baños privados o kitchenettes en oficinas de mayor jerarquía. Para complementar estos servicios, se proyecta un restaurante de primer nivel con cafetería, privados y un área de buffet para almuerzos ejecutivos, ubicado a más de 30 metros de altura sobre las cocheras, rodeado por un jardín panorámico con vista de 360 grados a la ciudad. El área gastronómica tendrá infraestructura de apoyo con depósitos pulmón, elevador de vehículos, cocina industrial, baños de alta gama y conectividad directa desde cualquier ascensor o cochera, sin comprometer la seguridad de las oficinas. Esta versatilidad permitirá celebrar eventos empresariales y sociales de forma continua, con capacidad logística para recibir, adaptar y desmontar montajes de gran escala sin afectar las operaciones del edificio. Desde el punto de vista técnico, las oficinas contarán con sistemas de climatización tipo split, contrapisos compuestos por dos capas —una densa para fijación estructural y otra liviana para instalación de ductos— y ventilación cruzada operada eléctricamente, controlable por domótica. El sistema permitirá regular humedad, temperatura y calidad del aire incluso en días lluviosos, gracias a un diseño exclusivo con trampas de agua. La ausencia de aberturas directas hacia el exterior responde a los protocolos internacionales de seguridad, pero sin sacrificar la calidad ambiental interior. La infraestructura también contempla accesos para ambulancias y camillas, generadores de emergencia para todo el edificio, oficina administrativa, y depósitos destinados a mantenimiento, limpieza y residuos, gestionados mediante un sistema logístico eficiente y ordenado. El mantenimiento de la fachada está garantizado por un sistema de andamiaje seguro, que corre por el espacio entre los vidrios cortina y las estructuras tensadas, generando además un efecto estético de profundidad y reflejo único en su tipo. Para cumplir con los requerimientos de empresas multinacionales, Prestigio cuenta con dos escaleras de incendios con accesos independientes y con drop-off ubicados en frente al acceso de planta baja para la subida y bajada de pasajeros. El proyecto ofrecerá superficies de oficinas adaptables a diversas necesidades corporativas, desde los 880 m² hasta plantas completas de 1.800 m², permitiendo configurar espacios según el perfil y la escala de cada empresa. Las oficinas dentro de PRESTIGIO han sido diseñadas con flexibilidad para que dos o más pisos puedan integrarse como una sola unidad funcional, generando conjuntos corporativos de gran escala, conectados internamente y completamente jerarquizados. Esta configuración permite al propietario estructurar, dentro del mismo edificio, su propio ecosistema de trabajo, con circulación interna privada, accesos diferenciados y zonas operativas vinculadas directamente con áreas de recepción o espera mediante ascensores de uso exclusivo. Esta capacidad de expansión modular elimina cualquier límite en la superficie operativa que una empresa pueda ocupar, ofreciendo una flexibilidad y continuidad espacial difícil de encontrar en otras ubicaciones corporativas de Asunción. PRESTIGIO tiene previsto iniciar obras en la segunda mitad de 2025, con un plazo estimado de ejecución de 42 meses. Gustafson & Asociados S.A., responsable del desarrollo y construcción del proyecto, reafirma con PRESTIGIO su compromiso con una arquitectura de alto estándar, sostenida en el tiempo por una estrategia de permanencia, servicio posventa y administración directa. En un mercado que valora cada vez más la confiabilidad, el diseño funcional y el respaldo de largo plazo, PRESTIGIO se posiciona como una propuesta integral, capaz de redefinir el concepto de edificio corporativo en Paraguay. Para más información sobre PRESTIGIO, podes completar el siguiente formulario y la desarrolladora se contactará con usted:

  • ¿Asunción o las Afueras? : El Dilema de Quienes Buscan Casa Propia en un Mercado en Transformación

    El avance de los edificios en altura dentro de Asunción y el crecimiento sostenido de los barrios cerrados en la periferia plantea una elección cada vez más común entre los compradores: invertir en la ciudad o apostar por un terreno en zonas suburbanas. Con el auge de los edificios en altura dentro de Asunción y el desarrollo cada vez más sofisticado de loteamientos suburbanos, la pregunta que hoy se hacen muchas familias paraguayas es tan simple como trascendental: ¿conviene comprar una casa en Asunción o invertir en un terreno para construir en las periferias? Esta disyuntiva ya no se limita al precio del metro cuadrado, sino que abre un abanico de criterios vinculados a calidad de vida, infraestructura, acceso a servicios y proyección de valorización. Zonas como Luque, Limpio, Mariano Roque Alonso y Nueva Asunción se han consolidado como epicentros de la expansión suburbana, con barrios cerrados que incorporan diseño urbano, amenities de primer nivel y comunidad. Mientras tanto, Asunción sigue siendo el nodo institucional, laboral, educativo y cultural más importante del país. Ambas alternativas tienen ventajas y desafíos que vale la pena revisar en detalle. Vivir en Asunción sigue representando una ventaja importante en términos de ubicación y proximidad a los principales centros de trabajo, salud, educación y servicios. La capital concentra la mayor parte de las oficinas corporativas, estudios jurídicos, entidades gubernamentales, bancos, clínicas privadas, universidades y colegios de prestigio. Barrios como Villa Morra, Recoleta, Las Lomas e Ycua Satí permiten resolver la vida cotidiana sin grandes desplazamientos. Los Pingos en Surubi'i Esta cercanía no es menor: quienes viven en la ciudad pueden evitar los traslados prolongados durante las horas pico, en las que un viaje desde zonas como Limpio o Mariano Roque Alonso hasta el Shopping del Sol puede tardar entre 20 y 35 minutos. Además, Asunción ofrece mejor conectividad a internet (especialmente por cobertura de fibra óptica), mayor cobertura de plataformas de movilidad como Uber o Bolt, servicios logísticos más eficientes y acceso rápido a delivery de prácticamente cualquier rubro. Por otro lado, los desarrollos periféricos han elevado sustancialmente su propuesta de valor en los últimos años. Barrios cerrados en Luque, Mariano R. Alonso, Limpio o Nueva Asunción cuentan hoy con infraestructura de alta calidad: calles asfaltadas, veredas homogéneas, cableado subterráneo, paisajismo cuidado, seguridad privada 24 horas y planificación urbana integral. Algunos incluso suman lagunas naturales, clubes náuticos, canchas deportivas, supermercados 24/7 o lagunas cristalinas con tecnología Crystal Lagoons. Estas urbanizaciones responden a una demanda creciente de quienes buscan mayor tranquilidad, contacto con la naturaleza y una vida familiar más contenida. Además, los precios siguen siendo muy competitivos: en Mariano Roque Alonso y Limpio es posible adquirir lotes desde USD 100 a 130 por m²; en Luque, donde ya existen barrios cerrados consolidados y en funcionamiento, los precios oscilan entre USD 225 y 300 por m², según ubicación y nivel de infraestructura; mientras que en Nueva Asunción se pueden encontrar proyectos en etapas iniciales desde USD 150 por m², llegando hasta los USD 300 por m² en desarrollos cercanos a inaugurarse. En comparación, en barrios consolidados de Asunción es difícil encontrar terrenos por debajo de los USD 500 por m², e incluso en algunos barrios los precios superan los USD 1.000 por m², particularmente en zonas con alta demanda y buena conectividad. Aquadelta en Limpio Asunción sigue ofreciendo oportunidades de valorización, especialmente en zonas donde la normativa urbanística se está flexibilizando y permite nuevos desarrollos verticales. Muchos terrenos hoy se comercializan por su potencial constructivo más que por su uso actual. Para compradores con un perfil inversor, ciertos sectores de la capital aún representan una apuesta sólida a largo plazo. Sin embargo, la periferia también muestra signos de revalorización sostenida. La creación de asociaciones como Distrito Norte —integrada por desarrolladores que trabajan en forma coordinada con los municipios de Luque, Limpio y Mariano Roque Alonso— apunta a mejorar la infraestructura urbana del entorno, elevando el estándar general y atrayendo nuevas inversiones. Esta visión compartida aumenta la confianza de los compradores y contribuye a una valorización más estructurada del suelo. Una diferencia práctica importante es la disponibilidad de viviendas terminadas. Mientras que en Asunción aún se pueden encontrar casas listas para habitar, en las zonas suburbanas la mayoría de las ofertas corresponden a terrenos. Solo en barrios cerrados en Luque existen opciones de casas ya construidas. En el resto de las zonas periféricas, la modalidad predominante es la construcción por cuenta propia o a través de alianzas con desarrolladores. Esto implica asumir procesos de diseño, obra, permisos y plazos, lo cual puede representar una ventaja en términos de personalización, pero también un desafío para quienes necesitan mudarse en el corto plazo. La capital ofrece una vida urbana intensa, con acceso a restaurantes, cafés, museos, galerías, cines y centros comerciales. Barrios como Las Mercedes, Recoleta, Villa Morra y el eje Corporativo han experimentado un renacimiento cultural que nutre la vida social y la diversidad. El Delta en Nueva Asunción Por su parte, los barrios cerrados en la periferia fomentan un estilo de vida más tranquilo, enfocado en la seguridad, el esparcimiento y la convivencia vecinal. El diseño de estos desarrollos busca que los residentes puedan realizar actividades recreativas, deportivas o sociales sin salir del perímetro del barrio. La comunidad y el sentido de pertenencia son ejes centrales de esta propuesta. Aunque ya se encuentran en marcha planes para instalar hospitales satélites, nuevos colegios y eventualmente campus universitarios en zonas como Limpio y Mariano Roque Alonso, lo cierto es que muchos de estos proyectos aún están en fase de desarrollo. Esto obliga a muchas familias a seguir dependiendo de Asunción para cubrir necesidades esenciales en salud y educación. Sin embargo, la reciente inauguración del colegio Maple Bear en 2024 marcó un punto de inflexión para el panorama educativo de la zona. La institución, que forma parte de una red internacional con estándares de excelencia, tendrá un crecimiento progresivo: en el ciclo escolar 2025/2026 abrirá su sección primaria con el nivel Year 1, destinado a niños de seis años, y continuará incorporando grados año tras año hasta completar el currículo completo hasta Year 12. Si bien la ciudad ofrece ventajas estructurales, también arrastra problemas crónicos: congestión vehicular severa, costos altos del suelo, inseguridad creciente, infraestructura obsoleta y contaminación ambiental. La presión constructiva en barrios residenciales tradicionales ha generado conflictos por edificios que afectan la privacidad, la iluminación y la tranquilidad del entorno. En muchos sectores, las redes cloacales, el sistema de drenaje pluvial y el pavimento muestran niveles de deterioro que afectan directamente el confort residencial. Esta falta de mantenimiento y planificación contribuye a una percepción negativa sobre la habitabilidad urbana. Otro de los atractivos clave de las zonas periféricas es la posibilidad de acceder a terrenos “en pozo”, es decir, en etapas tempranas de desarrollo. Esta modalidad permite a los compradores adquirir lotes a precios significativamente más bajos, con planes de financiamiento a corto o mediano plazo, en muchos casos sin intereses. Para quienes proyectan su vivienda a futuro, representa una oportunidad única: no es necesario realizar un gran desembolso inicial, sino que se puede comenzar a construir el proyecto de vida paso a paso. Comprar hoy un terreno amplio, rodeado de naturaleza y en un barrio con amenities de calidad, habilita la posibilidad de construir —en tres, cuatro, cinco o seis años— la casa soñada en un entorno planificado, con seguridad, comunidad y acceso a servicios recreativos sin salir del barrio. Sunset Village en Nueva Asunción Además del acceso anticipado a precios más bajos, una de las grandes ventajas de invertir en la periferia es la posibilidad de adquirir lotes de mayor superficie, en entornos naturalmente arbolados, donde el diseño urbanístico busca preservar tanto el orden como la privacidad. A diferencia de lo que ocurre en muchos barrios tradicionales de Asunción —donde el valor del terreno promueve la construcción de edificios en altura incluso en zonas residenciales—, los loteamientos suburbanos imponen normativas claras sobre densidad, altura y uso del suelo. Esto brinda a los propietarios la tranquilidad de saber que, al construir su casa, no verán afectada su calidad de vida por torres contiguas que generen sombra, ruidos o pérdida de intimidad. Esa previsibilidad en el entorno es uno de los elementos más valorados por quienes planifican su hogar a largo plazo. La elección entre una casa en Asunción o un terreno en la periferia ya no se define solo por el precio del m². Se trata de una decisión que debe considerar el estilo de vida, la etapa familiar, la disponibilidad financiera, el horizonte de permanencia y la valoración personal sobre comunidad, conectividad y entorno. Por primera vez, las zonas suburbanas compiten en condiciones más parejas frente a la ciudad capital. Su propuesta no se basa únicamente en el ahorro, sino en un nuevo modelo de hábitat que integra diseño, seguridad, naturaleza y vida en comunidad. Mientras tanto, Asunción sigue siendo el nodo funcional más denso del país, pero enfrenta desafíos estructurales que deben ser tenidos en cuenta. Ambas alternativas ofrecen valor. La diferencia está en lo que cada familia busca construir como hogar. Si estás considerando adquirir una casa en Asunción o invertir en un terreno en las periferias, y querés explorar opciones concretas según tus necesidades, podés completar el siguiente formulario:

  • Los Pingos Arranca La Construcción De Sus Amenities: El Inicio De Un Estilo De Vida Pensado En Comunidad

    Las obras comienzan a dar forma a los espacios comunes del proyecto, en una etapa clave para consolidar la visión integral de un barrio que prioriza la funcionalidad, la conexión humana y el bienestar cotidiano. El día de ayer marcó un nuevo capítulo en el desarrollo de Los Pingos: Club de Campo , con el inicio formal de las obras de los amenities. La palada inicial contó con la presencia de representantes de Benítez Bittar, Altius Group Paraguay, inversores, futuros residentes y vecinos del barrio Surubi’í, en una jornada que simbolizó no solo el avance de las obras, sino también la consolidación de una propuesta integral que aspira a transformar la forma de habitar en las afueras de Asunción. Ubicado dentro de la tradicional urbanización Surubi’í, Los Pingos es un desarrollo residencial de gran escala que combina naturaleza, infraestructura moderna y vida social activa. Con una ubicación estratégica a orillas del Riacho San Francisco y a escasos 3.200 metros de la Avenida General Aquino, Ruta Transchaco, el proyecto se posiciona en uno de los sectores con mayor proyección del área metropolitana, en un entorno vinculado a algunas de las instituciones sociales y deportivas más emblemáticas de la capital. Los amenities de Los Pingos fueron concebidos como un diferencial real en el mercado local. No se trata únicamente de una lista de servicios, sino de una experiencia integral que refleja un profundo entendimiento de las necesidades del día a día. El área del club incluirá un quincho con capacidad para sesenta personas, pensado como un espacio de encuentro comunitario donde celebrar desde cumpleaños hasta reuniones informales. También se desarrollará un supermercado de autoservicio con funcionamiento las 24 horas, accesible mediante aplicación, una solución que ya se implementa exitosamente en barrios cerrados de otros países y que busca dar respuesta práctica a las demandas cotidianas. La propuesta se completa con piscinas diferenciadas para adultos y niños, un gimnasio, sauna, canchas de tenis y pádel, y una cancha multideporte adaptable a distintas disciplinas. Todo el perímetro del barrio será acompañado por un sendero aeróbico de más de siete kilómetros, permitiendo a los residentes caminar, correr o andar en bicicleta dentro del predio sin salir del entorno seguro y natural del proyecto. Estos espacios, lejos de ser accesorios, constituyen el núcleo social y recreativo de la vida en Los Pingos. La intención no es solo ofrecer servicios, sino generar vínculos. En palabras de sus impulsores, el verdadero valor de un barrio cerrado radica en la posibilidad de construir comunidad entre personas que comparten valores, intereses y un mismo estilo de vida. Este concepto se materializa también en el entorno inmediato. La cercanía con el Club Centenario y su cancha de golf, así como con el CURDA y el Club de Rugby San José, contribuye a enriquecer la propuesta con actividades deportivas y sociales que ya forman parte del estilo de vida de muchos de los futuros residentes. La seguridad, la tranquilidad, y la posibilidad de que los hijos se muevan libremente en bicicleta o a pie entre casas amigas, son aspectos que definen este tipo de desarrollos, que apuntan a mucho más que una simple urbanización. Los Pingos nace como una propuesta estructuralmente superior: infraestructura vial bien ejecutada, paisajismo cuidado, calles anchas, lagunas naturales terminadas con detalles de calidad como tablestacado de madera, y obras de base que elevan el terreno a cotas seguras para mitigar riesgos de inundación. Actualmente, el desarrollo alcanza un 40% de avance, y las obras particulares podrán comenzar en febrero de 2026, con el barrio completamente finalizado para diciembre del mismo año. Además de los espacios comunes, el proyecto contempla el desarrollo de un Centro Comercial en la entrada de Surubi’í, cuya primera etapa, ya iniciada, incluye el showroom del emprendimiento. Posteriormente se espera inaugurar el área gastronómica y el supermercado. El centro crecerá por etapas, en función del ritmo de ocupación del barrio, e incluirá servicios de salud, oficinas y locales comerciales, con una propuesta estética cuidada, escalable y funcional, alineada con la visión integral del proyecto. La consolidación de este ecosistema urbano se apoya también en la presencia del colegio bilingüe Maple Bear, ya en funcionamiento dentro del predio. Esta institución educativa canadiense con más de 500 sedes en todo el mundo representa uno de los pilares del concepto de ciudad-jardín planteado por Los Pingos: un lugar donde se pueda vivir, estudiar, trabajar y acceder a servicios sin abandonar el entorno natural. La conectividad se verá fortalecida por la duplicación del camino de la Ruta 025 y la construcción de un nuevo acceso desde la Ruta 3 con un puente vehicular, ya en desarrollo. Con más del 40% de los lotes ya comercializados —incluyendo terrenos internos y sobre laguna— el equipo se prepara para lanzar una nueva tipología: los townhouses, casas de aproximadamente 170 m² cubiertos, con jardín y piscina privada, que se venderán terminadas, ofreciendo una alternativa funcional a quienes buscan mudarse sin pasar por un proceso de obra. Estas viviendas, cuyo diseño sigue la misma línea estética del resto del proyecto, están pensadas para un público amplio, desde familias jóvenes hasta personas mayores que valoran la comodidad, la seguridad y el acceso directo a todos los servicios del barrio. Su lanzamiento está previsto para los próximos treinta días. El diseño arquitectónico y paisajístico estuvo a cargo del estudio Pacífica, del arquitecto Ezequiel Gil, quien junto a su hermano Félix fundó la firma en 2010 con el objetivo de combinar creatividad e ingeniería en desarrollos innovadores. Los proyectos de Pacífica se destacan internacionalmente por reinterpretar con originalidad los cánones estéticos europeos, manteniendo su funcionalidad y sobriedad, pero incorporando una mirada contemporánea que captura dimensiones de la realidad que normalmente pasan desapercibidas. Esa mirada se refleja en cada detalle de Los Pingos, desde el diseño del pórtico hasta la integración de la laguna y los senderos con el entorno natural. Detrás del proyecto se encuentra Altius Group Paraguay, filial local del grupo regional que ha desarrollado más de 80 millones de metros cuadrados en América Latina, con 29.000 unidades residenciales y más de 65.000 m² comerciales. En Paraguay, el grupo ha entregado el proyecto More del Sol y actualmente se encuentra construyendo More Plaza , Nostrum Trinidad y Central Mariscal . La visión de Altius combina innovación arquitectónica, sensibilidad urbana y una apuesta por transformar la forma en que las personas viven e interactúan con su entorno. Los Pingos no es una urbanización más. Es un nuevo modelo de comunidad, una plataforma de desarrollo urbano planificado que tiene el potencial de replicar lo que ya ocurrió en otras ciudades de la región: primero llegan los barrios, luego los colegios, y a partir de ahí se desencadena una transformación urbana que trae servicios, salud, educación superior y nuevas centralidades. Por eso, quienes hoy eligen vivir en Los Pingos no solo están comprando un terreno o una casa, están eligiendo formar parte de un nuevo concepto de ciudad.

  • Zonas Francas en Paraguay: Marco Legal, Funcionamiento, Beneficios y Oportunidades Estratégicas

    Un régimen con base legal sólida y beneficios contundentes, pero aún poco aprovechado: las zonas francas en Paraguay revelan tanto su potencial estratégico como las barreras que impiden su expansión. El régimen de zonas francas en Paraguay se erige como una herramienta estratégica para el desarrollo industrial, la atracción de inversiones y la dinamización territorial. Diseñado bajo la Ley N.º 523/95 y complementado por un conjunto de decretos reglamentarios, establece un marco excepcional dentro del ordenamiento aduanero paraguayo, en el cual las mercaderías pueden ser introducidas, almacenadas, transformadas, comercializadas o reexportadas sin estar sujetas a los tributos generales que rigen en el territorio aduanero nacional. Esta condición, que convierte a las zonas francas en verdaderos enclaves productivos, ha permitido no solo captar capital extranjero, sino también desarrollar plataformas logísticas, industriales y de servicios orientadas al comercio internacional. Proyecto de Zona Franca Omega Green en Villeta En el centro de este esquema se encuentra la figura del concesionario, una persona jurídica que firma un contrato con el Estado paraguayo para operar y administrar una zona franca por un periodo inicial de treinta años, prorrogables. Este concesionario debe cumplir con una serie de requisitos establecidos por el Consejo Nacional de Zonas Francas, como disponer de infraestructura adecuada (cerco perimetral, acceso controlado, sistemas de videovigilancia, balanza, oficinas para aduana y servicios conexos), presentar un plan de negocio viable y demostrar capacidad técnica y financiera. Una vez habilitado, el concesionario puede arrendar espacios a usuarios que deseen operar bajo el régimen especial. La habilitación de una zona franca requiere, además, la presentación de un proyecto técnico-económico, el título de propiedad o contrato de tenencia sobre el terreno por al menos treinta años, un estudio ambiental conforme a la SEAM y una propuesta tarifaria para los usuarios. Una vez aprobado, el contrato de concesión se formaliza mediante decreto del Poder Ejecutivo, previo dictamen favorable del Consejo Nacional de Zonas Francas. Los usuarios son personas físicas o jurídicas que desarrollan actividades productivas, comerciales o de servicios en el interior del recinto autorizado. Para operar, deben firmar un contrato con el concesionario y registrarse ante la Subsecretaría de Estado de Tributación y ante el propio Consejo Nacional de Zonas Francas. Pueden optar por tributar exclusivamente el "Impuesto de Zona Franca" del 0,5% sobre el valor de sus exportaciones a terceros países, siempre que la totalidad de su producción esté destinada al exterior. Si comercializan dentro del mercado local, deben pagar los impuestos habituales bajo el régimen general. Están obligados, además, a llevar una contabilidad independiente de sus operaciones dentro y fuera del recinto, mantener actualizado el inventario de existencias y someterse a auditorías periódicas. Uno de los aspectos más fuertes del régimen es su tratamiento aduanero. Las mercaderías que ingresan a una zona franca están exentas del pago de aranceles, del IVA y de cualquier otro tributo. Pueden ser almacenadas, transformadas o reexportadas sin restricción temporal. Estas operaciones están sujetas a un estricto control documental y físico por parte de la Dirección Nacional de Aduanas. Los usuarios deben contar con un sistema de inventario digitalizado y actualizado en tiempo real, registrar todos los movimientos de ingreso y salida, y mantener trazabilidad de cada operación. Además, los bienes pueden salir temporalmente del recinto para ser exhibidos en ferias, reparados o sometidos a procesos externos autorizados, siempre que regresen dentro de los plazos establecidos. Todo movimiento está regulado por el Sistema Informático SOFIA, que interconecta las zonas francas con la administración aduanera. Las actividades autorizadas dentro de una zona franca abarcan una amplia gama de rubros: desde industrias manufactureras orientadas a la exportación, hasta prestadores de servicios tecnológicos, call centers, centros de investigación y desarrollo, empresas logísticas, firmas farmacéuticas, laboratorios, estudios de arquitectura, producción audiovisual y más. Esta apertura sectorial ha sido fortalecida por decretos como el N.º 4611/20, que amplía y clarifica el tipo de actividades admisibles. La normativa también contempla reglas precisas para el ingreso y salida de personas, bienes y vehículos. Todo acceso debe ser controlado y registrado. Las zonas cuentan con áreas de libre circulación y áreas restringidas, y se exige identificación permanente para el personal, contratistas y visitantes. La venta al por menor está permitida bajo condiciones puntuales, siempre que el comprador cumpla con los requisitos aduaneros para nacionalizar la mercadería. El marco legal también establece mecanismos precisos de control y sanción. El Consejo Nacional de Zonas Francas tiene atribuciones para fiscalizar el cumplimiento de las obligaciones contractuales y legales de concesionarios y usuarios. Ante infracciones, puede aplicar medidas correctivas que van desde multas hasta la suspensión o cancelación de los contratos. Existen procedimientos administrativos para recurrir las decisiones ante el Ministerio de Hacienda, y en el caso de controversias mayores, se contempla la posibilidad de acudir a arbitraje nacional o internacional, incluso bajo los auspicios del CIADI si se trata de inversiones extranjeras protegidas por tratados bilaterales. Para el sector inmobiliario, este régimen representa una oportunidad concreta de desarrollo de parques industriales, logísticos y de servicios. Los desarrolladores pueden convertirse en concesionarios o asociarse con operadores internacionales para atraer usuarios globales. El valor del suelo dentro de zonas francas tiende a incrementarse debido al marco normativo diferencial, la seguridad jurídica y la demanda concentrada de espacio productivo. En un contexto de transformación de las cadenas globales de suministro, Paraguay tiene la posibilidad de posicionarse como hub regional competitivo si logra consolidar la implementación efectiva y armónica de su régimen de zonas francas. A pesar de la solidez jurídica y el atractivo impositivo del régimen, las zonas francas en Paraguay siguen estando subexplotadas en comparación con su potencial real. Esta realidad obedece a una combinación de factores estructurales y operativos que limitan su expansión. Uno de los principales obstáculos es la vigencia de la Decisión CMC N.º 08/94 del Mercosur, que establece que los productos procesados en zonas francas pierden su origen regional. Esta disposición encarece las exportaciones hacia los socios del bloque, especialmente Brasil, que aplica controles rigurosos y, en muchos casos, desconoce los certificados de origen derivados emitidos por Paraguay. Aunque la Decisión N.º 33/15 flexibilizó parcialmente este criterio, su implementación ha sido desigual, y el desconocimiento técnico sobre su aplicación sigue siendo una barrera. A esto se suma una implementación institucional parcial. Si bien existe un marco legal robusto, las capacidades técnicas del Consejo Nacional de Zonas Francas son limitadas, y la articulación con otros organismos —como Aduanas, el Ministerio de Industria y Comercio y Tributación— suele ser deficiente. Esto ralentiza trámites, genera incertidumbre normativa y disminuye la previsibilidad para el inversor. Además, el desconocimiento generalizado sobre el funcionamiento del régimen también ha jugado en contra. A diferencia de la Ley de Maquila, que ha sido objeto de campañas de difusión, el régimen de zonas francas permanece en gran medida invisibilizado, incluso entre empresarios, desarrolladores e intermediarios. Muchos desconocen que pueden acceder a exoneraciones fiscales completas, o que pueden convertirse en concesionarios y desarrollar infraestructura propia bajo este régimen. Otro factor limitante es la falta de incentivos específicos para que desarrolladores inmobiliarios apuesten por el modelo. La inversión inicial requerida para urbanizar una zona franca es considerable, y no existen líneas de financiamiento, garantías estatales o mecanismos de promoción que mitiguen ese riesgo. Esto ha llevado a una concentración de las zonas francas existentes en Ciudad del Este, con poca diversificación territorial. Frente a estas limitaciones, muchos proyectos industriales han optado por el régimen de maquila, que es más flexible, no requiere infraestructura cerrada y ofrece un tratamiento fiscal igualmente atractivo (1% del valor agregado), además de facilitar el reconocimiento de origen Mercosur. En síntesis, las zonas francas paraguayas constituyen una herramienta robusta, legalmente consolidada y con enorme potencial para apalancar el desarrollo económico. Con una regulación clara, beneficios fiscales contundentes y un abanico amplio de actividades permitidas, se perfilan como uno de los instrumentos más eficientes para atraer inversión, crear empleo y transformar la geografía productiva del país.

  • Distrito Norte: La Asociación Que Está Impulsando la Infraestructura Urbana al Norte de Asunción

    Una alianza entre desarrolladores, educadores y operadores comerciales busca transformar el corredor Luque–Mariano–Limpio en un nuevo eje urbano planificado, integrando infraestructura, servicios y comunidad desde una visión compartida . Paulina Zavala, propietaria de Maple Bear Surubi’i; Eduardo Pérez, director de Altamira Group; Josefina Robinson, presidenta de Maple Bear Surubi’i; Santiago Lantermino, gerente general de Penta; Andrea Fuks, moderadora; Ernesto Figueredo, presidente de Raíces Real Estate; y Francisco Jorge, CEO de Altius Group Paraguay. Mientras el crecimiento demográfico y la expansión inmobiliaria avanzan a paso firme sobre los municipios de Luque, Mariano Roque Alonso y Limpio, un grupo de desarrolladores decidió no limitarse a acompañar el fenómeno, sino anticiparse a sus consecuencias. En el marco de la Expo Real Estate Paraguay 2025, se presentó públicamente la Asociación Distrito Norte, una organización sin fines de lucro integrada por actores claves del sector privado que, en vez de competir en solitario, optaron por colaborar en la creación de una nueva centralidad metropolitana al norte de Asunción. Distrito Norte no es un emprendimiento inmobiliario, ni un desarrollo cerrado con reglas de cohabitación; es una visión compartida sobre cómo ordenar y potenciar un territorio en plena transformación. Su origen se remonta a una serie de conversaciones informales entre empresas como Altamira Group, Altius Group, Raíces Real Estate, Penta y representantes del colegio Maple Bear. Todas operaban en la misma región, muchas veces con productos inmobiliarios similares. Pero al observar el crecimiento simultáneo de sus proyectos, comprendieron que el verdadero desafío no era vender unidades, sino construir un ecosistema urbano integrado. El diagnóstico era claro: el corredor norte del área metropolitana de Asunción concentraba algunas de las tasas de crecimiento más elevadas del país, pero enfrentaba severas limitaciones en infraestructura, conectividad vial, servicios básicos, acceso a la salud, educación y equipamientos urbanos. Las autoridades locales, si bien conscientes de la necesidad de intervenir, operaban con restricciones presupuestarias que hacían inviable cualquier tipo de planificación urbana a gran escala. Frente a esta realidad, la Asociación Distrito Norte se constituyó con un objetivo estratégico: alinear los esfuerzos del sector privado, coordinar el diálogo con el sector público y anticipar —mediante inversión y planificación— las condiciones necesarias para consolidar un territorio habitable, inclusivo y funcional. La escala del compromiso es significativa: entre los integrantes de la asociación ya se proyectan más de 6.000 unidades habitacionales y un volumen de inversión estimado en 1.500 millones de dólares. Uno de los elementos distintivos de Distrito Norte es su enfoque holístico. En lugar de limitarse a desarrollar barrios cerrados aislados entre sí, los miembros promueven una planificación territorial que contemple no solo la vivienda, sino también la vida cotidiana. Esto implica integrar desde el inicio centros educativos, instituciones médicas, espacios comerciales, áreas de entretenimiento, instalaciones deportivas, e incluso soluciones de transporte y formación laboral. La aspiración no es construir ciudades dormitorio, sino entornos urbanos completos, donde el tiempo —el verdadero lujo de esta época— pueda ser vivido con plenitud. En ese sentido, uno de los hitos más relevantes fue la instalación del colegio Maple Bear en Surubi’i, una decisión estratégica que respondió a una demanda concreta: las familias no se mudarían a la zona si no contaban con una oferta educativa de calidad para sus hijos. A partir de esa lógica, surgieron nuevas alianzas, se consolidaron proyectos residenciales y se diseñaron espacios comerciales con un enfoque de experiencia, rompiendo el molde tradicional del shopping center como contenedor de tiendas para apostar por núcleos urbanos vivos, con gastronomía, cultura, entretenimiento y servicios. La visión colaborativa no se limita al diseño del espacio privado. En los últimos años, la Asociación también ha impulsado iniciativas directas para acelerar obras de infraestructura pública. Un ejemplo emblemático es la duplicación de la Ruta 025 —acceso clave al Aeropuerto Internacional— cuyo proyecto de ingeniería fue donado por los miembros de la Asociación, permitiendo al Estado licitar rápidamente la obra sin demoras en los procesos técnicos. Del mismo modo, se planifican nuevas conexiones viales, como el corredor que unirá la Ruta 025 con la ciudad de Limpio. El modelo también se distingue por su relación con el sector público. Consciente de las limitaciones fiscales y administrativas que enfrentan los municipios, la Asociación adoptó un enfoque proactivo para acelerar obras clave. Un ejemplo concreto fue la duplicación de la Ruta 025, arteria esencial para el acceso al aeropuerto. En lugar de esperar años por los procesos de licitación estatal, los miembros donaron el diseño técnico de la obra, permitiendo al gobierno iniciar rápidamente su ejecución. Ese mismo modelo se repite ahora con nuevas conexiones viales que buscan integrar a Limpio con el corredor principal y descomprimir la red existente. El aporte privado a obras públicas marca un giro en la lógica tradicional de desarrollo urbano en Paraguay. Ya no se trata solo de cumplir con exigencias municipales mínimas, sino de invertir colectivamente en obras estructurales que benefician tanto a los proyectos privados como a las comunidades vecinas. Esta coordinación es también una forma de mitigar asimetrías históricas, donde urbanizaciones cerradas convivían con barrios precarios sin acceso a agua potable, alumbrado público o servicios básicos. Desde el punto de vista de quienes lideran el proyecto, la prioridad es construir un entorno urbano equilibrado, donde quienes habitan los barrios privados compartan territorio con quienes prestan servicios, trabajan en comercios, enseñan en escuelas o cuidan a los niños. La inclusión, en ese sentido, no es un concepto accesorio, sino un principio de sostenibilidad urbana. Las viviendas, los comercios, las escuelas, los clubes y los espacios públicos deben pensarse juntos, como parte de un todo, no como piezas sueltas de una maqueta. Esa visión también se apoya en antecedentes regionales. Uno de los referentes del grupo relató su experiencia en Pilar, al norte de Buenos Aires, donde en los años noventa un modelo similar de desarrollo suburbano articulado permitió transformar una zona semi-rural en un verdadero clúster urbano con universidades, hospitales, oficinas corporativas y una red integrada de barrios residenciales. La clave, recordó, fue siempre la misma: infraestructura, coordinación y visión compartida. El caso paraguayo, sin embargo, tiene sus particularidades. En un país donde la planificación urbana es aún incipiente y los marcos regulatorios están en evolución, proyectos como Distrito Norte desafían las formas tradicionales de construir ciudad. Lo hacen desde el sector privado, pero con una vocación pública explícita. Y lo hacen, además, con una apertura clara hacia nuevas incorporaciones. El grupo fundacional no se plantea como un círculo cerrado, sino como un núcleo inicial dispuesto a integrar a otros actores, tanto desarrolladores como instituciones educativas, clubes deportivos, prestadores de salud o servicios logísticos. La dimensión del impacto ya es tangible. Se están gestando nuevos polos comerciales como Plaza Norte en Limpio, y se proyectan complejos de usos mixtos en Mariano Roque Alonso. La articulación entre actores se da también a nivel de alianzas: empresas que alguna vez fueron competidoras directas hoy se convierten en socias en centros comerciales, en infraestructura vial o en la planificación de nodos de servicios compartidos. A futuro, la visión es aún más ambiciosa. El objetivo es consolidar un eje metropolitano descentralizado, conectado, multifuncional y sostenible. Un territorio donde vivir implique más que tener una casa; implique habitar un entorno completo, con oportunidades reales de educación, salud, trabajo y recreación. Un lugar donde los nuevos desarrollos no desplacen a las comunidades existentes, sino que las integren, las escuchen y las fortalezcan. En definitiva, Distrito Norte representa un nuevo modelo de urbanismo en Paraguay. Uno que no depende exclusivamente del Estado, pero tampoco lo reemplaza. Que no responde únicamente a la lógica del retorno económico, pero tampoco la ignora. Que apuesta por un desarrollo urbano más maduro, más dialogado, y sobre todo, más coherente con el país que queremos construir. Un país donde el crecimiento no sea sinónimo de dispersión, sino de integración inteligente y compartida.

  • Barrio Cerrado La Escondida 3: Un Refugio de Tranquilidad y Comunidad

    En el corazón de Asunción, entre Mariscal López y Boggiani, se encuentra el nuevo y exclusivo barrio cerrado La Escondida 3. Este proyecto de viviendas redefine el concepto de comunidad, combinando la independencia de cada hogar con un entorno seguro y familiar, ideal para quienes buscan un estilo de vida tranquilo y seguro para sus familias. La Escondida 3 se destaca por ofrecer doce casas completamente independientes. Cada vivienda cuenta con su propio quincho cerrado, pileta, y patio, eliminando la necesidad de áreas comunes compartidas. Este diseño no solo mejora la convivencia al evitar conflictos por el uso de espacios comunes, sino que también proporciona un entorno más tranquilo para los residentes. No hay necesidad de reservar quinchos ni preocuparse por el ruido de fiestas prolongadas, lo que contribuye a una mayor armonía entre vecinos. Una de las características más destacadas de La Escondida 3 es su entorno seguro para los niños. La calle central del condominio se convierte en un lugar de encuentro para los más pequeños, quienes disfrutan de la libertad de andar en bicicleta, jugar al básquet o simplemente pasar tiempo con amigos. Este ambiente recrea la sensación de libertad y seguridad que muchos adultos paraguayos recuerdan de su infancia, algo que hoy en día es difícil de encontrar debido a la inseguridad y el tráfico urbano. En La Escondida 3, los niños pueden disfrutar de un estilo de vida que fomenta la socialización y el juego al aire libre. Ubicado en Villa Aurelia, una zona residencial que aún no ha sido invadida por grandes edificios, La Escondida 3 ofrece una alternativa atractiva para quienes valoran la tranquilidad y la proximidad a servicios esenciales. Los residentes tienen acceso rápido a importantes avenidas como Mariscal López y Santa Teresa, facilitando el desplazamiento por la ciudad. Además, la cercanía al Colegio del Sol y otros servicios esenciales hace de este barrio cerrado una opción muy conveniente para familias con hijos pequeños. Las casas en La Escondida 3 varían entre 400 y 470 metros cuadrados de construcción, ofreciendo opciones de tres a cuatro habitaciones, con configuraciones adaptables según las necesidades del comprador. Las viviendas cuentan con cocina amplia, sala comedor, sala de TV, escritorio, quincho cerrado con parrilla, estacionamiento techado para dos a cuatro vehículos, y áreas de servicio completas. Este diseño integral asegura que cada casa sea cómoda y funcional, con espacios bien pensados para el almacenamiento y la vida diaria. El precio de las casas en La Escondida 3 comienza en 585,000 dólares. El objetivo de este proyecto es ofrecer un producto completo y de alta calidad sin ser excesivamente grande, haciendo que sea accesible para familias que manejan un presupuesto similar al de otros desarrollos como La Trinidad. Este enfoque permite que incluso quienes no necesitan grandes espacios puedan disfrutar de una vivienda de alta calidad en un entorno seguro y bien ubicado. Uno de los aspectos más atractivos de La Escondida 3 es su compromiso con la preservación del entorno natural. El terreno está lleno de árboles antiguos, y el diseño del proyecto se ha adaptado para mantener estos árboles en su lugar. Algunas casas incluso tienen árboles en medio del jardín o integrados en el diseño interior, proporcionando sombra y un ambiente natural que es cada vez más difícil de encontrar. Este enfoque no solo preserva la belleza natural del lugar, sino que también ofrece un valor añadido a los residentes. La construcción de La Escondida 3 está programada para iniciar en los próximos días, con un tiempo estimado de entrega de 16 a 18 meses. Comprar una casa en esta etapa ofrece la ventaja de personalizar aspectos de la vivienda, como el piso, el color interior y las griferías. Cada casa se construye con un enfoque en la personalización, asegurando que ninguna vivienda sea idéntica a otra y que cada propietario pueda tener una casa que refleje su estilo y preferencias personales. La empresa detrás de La Escondida 3 es GONU, con más de 26 años de experiencia en el mercado de la construcción y el desarrollo inmobiliario. La historia de GONU comenzó con los fundadores, quienes se mudaron varias veces buscando una casa que se adaptara a sus necesidades hasta que decidieron construir la suya propia. Esta experiencia les llevó a construir casas para vender y posteriormente a desarrollar proyectos a terceros. Con el tiempo, GONU ha evolucionado, creando barrios cerrados y condominios como La Trinidad y Pueblo del Río que ofrecen tranquilidad, seguridad y un sentido de comunidad para sus residentes. La Escondida 3 no es solo un lugar para vivir, sino una inversión en calidad de vida. Con su enfoque en la independencia de cada hogar, la seguridad para los niños, la preservación del entorno natural y la posibilidad de personalización, este proyecto ofrece una propuesta única en el mercado inmobiliario de Asunción. Para quienes buscan un hogar que combine confort, funcionalidad y un sentido de comunidad, La Escondida 3 se presenta como una opción inigualable. Para más información sobre La Escondida 3 podes completar el siguiente formulario:

  • Titulización Inmobiliaria: El Instrumento Que Puede Cambiar las Reglas del Financiamiento en Paraguay

    A partir del caso del proyecto La Colina en Uruguay, esta nota analiza en profundidad cómo funciona la titulización inmobiliaria, qué diferencias tiene con bonos, fondos y fideicomisos, y por qué Paraguay está listo para dar el salto hacia un financiamiento más sofisticado, transparente y competitivo. A comienzos de junio se anunció que el proyecto inmobiliario La Colina, ubicado en el barrio Biarritz del departamento de Maldonado, Uruguay, logró acceder a financiamiento internacional mediante un sofisticado instrumento financiero: la titulización de activos. Esta noticia, aunque centrada en Uruguay, abre una puerta para reflexionar sobre el potencial aún inexplorado de la titulización inmobiliaria en Paraguay, donde el marco legal ya existe, pero su implementación práctica aún enfrenta barreras estructurales. La titulización —también conocida como securitización— consiste en empaquetar activos generadores de ingresos futuros y transformarlos en títulos financieros negociables. En el ámbito inmobiliario, esto puede incluir contratos de preventa, alquileres garantizados o cuotas por cobrar. Estos flujos se agrupan en un fideicomiso, un patrimonio autónomo que no forma parte de los activos generales del desarrollador, y que garantiza a los inversionistas una fuente concreta de repago.

  • Créditos de Carbono: Un Nuevo Horizonte para Desarrolladores, Propietarios e Inversionistas Inmobiliarios

    De la rentabilidad por metro cuadrado al ingreso por tonelada de carbono: cómo los proyectos inmobiliarios pueden transformar eficiencia ambiental en valor financiero, sin renunciar a la propiedad de los créditos aun después de vender. Paraguay ha dado un paso estratégico al firmar con Singapur el primer acuerdo internacional bajo el Artículo 6.2 del Acuerdo de París, posicionándose como plataforma exportadora de créditos de carbono de alta integridad. Se estima que este nuevo mercado podría generar entre 250 y 500 millones de dólares anuales en divisas para el país, con un potencial de captura de hasta 5 millones de toneladas de CO₂ al año. En este contexto, el sector inmobiliario se encuentra ante una oportunidad inédita: convertir los metros cuadrados en activos ambientales. Desde grandes desarrolladores hasta propietarios de tierra que planean reforestar o conservar, todos pueden encontrar en los créditos de carbono una fuente alternativa de valor. Pero ¿qué implica realmente esta posibilidad? ¿Qué exige la ley? ¿Y cómo puede un actor del rubro estructurar un proyecto para aprovechar esta ventana?

  • Entrevista a Milton Jara, Director de AZ Inversiones

    Desde los dúplex familiares hasta la consolidación de una marca referente en el desarrollo habitacional del país, Milton Jara lidera AZ Inversiones con una visión enfocada en la expansión sostenida, la sensibilidad urbana y el compromiso con la profesionalización del sector. Milton Jara, Director de AZ Inversiones Con una formación académica que combina Marketing y Publicidad por la Universidad Americana y un MBA en Dirección de Empresas por la Universidad Austral de Argentina, Milton Jara es hoy uno de los referentes del desarrollo inmobiliario en Paraguay. Su incursión en el rubro no fue casual: proviene de una familia emprendedora, en la que desde temprana edad estuvo vinculado al trabajo dentro de la empresa madre, desempeñando diversas funciones. El verdadero punto de inflexión llegó hacia 2010, cuando junto a sus hermanos comenzó a participar activamente en pequeños proyectos de dúplex. A partir de esa experiencia inicial, identificaron una clave que marcaría su modelo de crecimiento: la posibilidad de escalar a través de la preventa, sin depender exclusivamente del capital propio. Así nació AZ Inversiones en 2011, como una empresa enfocada en ofrecer soluciones habitacionales accesibles y de calidad. El primer edificio, desarrollado en 2012 en el barrio Santa Ana, fue el inicio de una serie de emprendimientos que irían aumentando progresivamente en escala y complejidad. Hoy, con más de una década de experiencia, AZ Inversiones se posiciona como un actor consolidado del mercado residencial, combinando una estrategia de crecimiento sostenido con una visión clara de profesionalización del sector. Cuando empezaste con AZ Inversiones hace 12 años, el mercado inmobiliario paraguayo era muy distinto al actual. ¿Cuáles dirías que son las diferencias más significativas entre aquel contexto y el de hoy? El principal cambio, sin dudas, es el aumento desbalanceado de la oferta en ciertas zonas específicas. Nosotros siempre fuimos bastante objetivos con los desarrollos que encaramos. Procuramos realizar un análisis previo del mercado antes de iniciar cualquier proyecto. En lo personal, me gusta caminar por las cuadras de la zona para observar la salud financiera del barrio, porque normalmente esos vecinos son tus primeros compradores. Para mí, es un factor clave. Si veo casas descuidadas, sin pintura, con luces quemadas que no se reponen, eso ya me indica algo. Ese es, en cierta forma, el olfato del desarrollador. Recuerdo que cuando fui a Sajonia para evaluar un proyecto, noté que las casas estaban impecables, bien mantenidas, recién pintadas. Eso me dio la pauta de que la dueña probablemente querría comprar una unidad para su hijo. Ese tipo de detalles son señales. Ahora bien, también hay zonas que, si bien muestran buena salud financiera, eso no significa que estén listas para recibir desarrollos de gran magnitud. Simplemente porque no hay suficiente demanda real para absorberlos. Luego viene la demanda externa, que empuja aún más y refuerza una idea equivocada: la de una demanda que, en realidad, no existe. Eso es lo que ocurrió, por ejemplo, en la zona del eje corporativo, que fue creciendo más allá de su capacidad. Y hoy ya vemos otras áreas que comienzan a mostrar signos de saturación. Por eso insisto: el aumento desbalanceado de la oferta en zonas puntuales es, para mí, la diferencia más importante ¿Qué aprendizajes clave te dejó tu primer proyecto, Esperanza 1, como desarrollador y cómo influyeron en tu manera de encarar los siguientes emprendimientos? Aliarme con un buen constructor y tratar de ir juntos para que la calidad del producto se mantenga en el tiempo. Porque, quieras o no, estás haciendo una marca. Y la gente, cuando terminás tu proyecto, te va a recomendar o va a decir: "bueno, mi expectativa se cumplió con la realidad al final de la obra", y eso para nosotros es muy importante. En ese primer proyecto cambiamos de constructor a mitad de camino porque no nos gustó cómo venía. Pero al final, con el último constructor, terminó siendo un producto lindo. Y desde entonces seguimos construyendo con esa misma empresa, que nos entregó el proyecto como queríamos. Y eso, creo yo, sigue siendo un factor determinante para nuestro éxito. ¿Cómo influyó tu formación dentro de una familia de empresarios en tu forma de ver el desarrollo inmobiliario? Con mi hermano, de chicos íbamos a la oficina y jugábamos entre los papeles, que era la mercadería que vendíamos en ese momento -vendíamos resmas de papel. Yo jugaba a atender el teléfono, a ser secretario: "llevá este papel", "haceme una fotocopia". Entonces, el trabajo y la empresa ya estaban incorporados en mí desde la infancia. Es como cuando un papá deportista lleva a su hijo a clases de natación y ese hijo termina siendo nadador. Más o menos en ese sentido. Pero después viene la pregunta existencial, cuando uno ya tiene la edad suficiente: podés tomar exactamente el mismo camino o todo lo contrario. O te encanta la idea de seguir ese legado, o la rechazás porque sentís que fue impuesto y te volcás a algo totalmente distinto, como ser músico, por ejemplo. En mi caso, hubo una pregunta clave que me marcó: si mis padres pudieron crear y sostener una empresa exitosa que aporte a la comunidad, ¿por qué yo no? Esa frase se puede desarmar en dos partes. La primera es que encierra una fe implícita, inquebrantable. Es una afirmación muy joven también, con algo de inocencia respecto a lo difícil que realmente puede llegar a ser. Pero está cargada de confianza. La segunda parte es que también hay un reconocimiento del privilegio. En mi caso, yo nunca tuve necesidad, y probablemente si no hubiese arrancado una empresa, igual no me iba a faltar nada. Mi realidad no iba a cambiar si lo hacía o no. Entonces pensé: ¿por qué no intentar algo más grande, algo que pueda generar un impacto positivo en la comunidad, como lo hicieron mis padres? Creo que esos son los dos factores que más influyeron en mi forma de ver el desarrollo: la convicción heredada y la posibilidad real de lanzarme, justamente por el entorno en el que nací. Si mi realidad hubiese sido distinta —si en casa hubiese habido más necesidad- probablemente no habría fundado una empresa, sino que hubiera salido a trabajar desde temprano, a pagar las cuentas a fin de mes. Pero el contexto de privilegio también puede ser una motivación: uno tiene más margen para arriesgar, para crear. Uno de los aspectos que más distingue a AZ Inversiones es que desarrollan proyectos fuera del eje corporativo y comercial tradicional. ¿Qué los llevó a apostar por estos entornos? La razón principal fue la escasez de oferta en lugares con potencial de demanda. No es que nunca hayamos desarrollado en zonas tradicionales: en 2014, por ejemplo, compramos una propiedad en esquina en Villa Morra, donde hicimos el edificio Mondrian. Recuerdo que cuando terminamos la última losa, me paré a observar el entorno y era todo verde. Estábamos a cinco minutos caminando del shopping. Pero ya se veían algunos terrenos vallados y los primeros pozos de fundación. Ahí me di cuenta: "acá se van a levantar muchos edificios". Llamé a los inversores y les sugerí alquilar las unidades por un año o dos antes de venderlas. Esa fue nuestra estrategia. Después de eso, fuimos a Los Laureles. Me acuerdo que al año siguiente aún no había casi nada construido. El edificio Rembrandt, por ejemplo, era único en sus características, tanto por su diseño como por la zona en la que se encontraba, cerca del Super 6. Con el tiempo empezamos a ver más movimiento en zonas aledañas, no exactamente sobre la misma avenida, pero ya empezaban a surgir otros desarrollos. Entonces entendimos que Los Laureles ya había comenzado su propio ciclo. Fue en 2017 u 2018 cuando empecé a recorrer Molas López. Me iba en auto, recorría la zona, entraba por Primer Presidente, volvía por Santa Teresa. Y ya se notaban los primeros edificios importantes, otros en etapa de vallado. Ahí sentí que habíamos llegado un poco tarde. Y eso nos llevó a cambiar de enfoque: decidimos buscar zonas emergentes, pero llegar mucho más temprano. Así fue como compramos una propiedad en Sajonia, tres en el centro, y también en Las Mercedes. Apostamos por barrios que todavía no tienen una concentración masiva de desarrollos, pero que muestran signos claros de evolución. En el caso de Las Mercedes, si bien ya hay varios proyectos, son en su mayoría emprendimientos chicos. Eso es clave. No es lo mismo decir "el año que viene se inauguran 300 departamentos en Molas López" que "el año que viene en Las Mercedes se entregan tres edificios, de 20 o 30 unidades cada uno". La escala y la dinámica del mercado son completamente distintas. Y nosotros preferimos apostar donde todavía hay espacio para crecer de forma ordenada. En 2018 lanzaron Zenith Félix Bogado, uno de los primeros proyectos de usos mixtos del país, integrando residencias y oficinas en un mismo edificio. ¿Cómo surgió esa idea y qué desafios tuvieron para implementarla en el mercado local? El concepto de work & living ya está muy consolidado en las capitales del mundo. Las personas —y los negocios también— se mueven cada vez más por eficiencia. Hablamos de ciudades de 15 minutos, de walking distance. Que uno pueda ir caminando al trabajo, al café, al restaurante. Que tenga los servicios cerca y no necesite usar el vehículo para todo. Porque hoy en día salir con el auto significa tiempo, gastos, estrés. Y más en un país como el nuestro, donde hace muchísimo calor: si puedo tener todo en el mismo proyecto, no necesito salir del aire acondicionado. Eso es gravital. Te doy un ejemplo concreto. Elliot, una persona que se mudó a Zenith, me contó que vendió su auto después de instalarse ahí. Antes vivía en Fernando de la Mora y trabajaba en el centro. Cuando se mudó, alquiló una oficina en la parte corporativa del edificio —que incluso tiene caja de ascensores separada de la residencial—, y pagaba lo mismo que pagaba antes: dos millones ochocientos. Pero su calidad de vida cambió completamente. El departamento era más chico, sí, pero ya no tenía que cortar el pasto, ni pintar, ni cambiar luces. Y además tenía pileta, gimnasio, todos los servicios a mano y sin preocuparse por mantener nada. Usaba la pileta limpia, sin saber ni a qué hora la limpian. Todo estaba listo para usar. Esa es la diferencia. También me contaba que un día se lesionó el hombro entrenando, y fue a hacer fisioterapia en el mismo edificio, en la sede del Sanatorio Británico que está en el cuarto piso. O sea, terminó de trabajar, se fue a entrenar, se lesionó y se atendió todo en el mismo lugar. Si quiere desayunar, baja, compra una medialuna en la cafetería y sube de nuevo a la oficina. Esa dinámica es algo pensado, diseñado. Y es algo que difícilmente encontrás en otros proyectos. Funcionó. A pesar de que el desafío más grande fue la pandemia, que nos golpeó justo antes de terminar el edificio. Vender durante la pandemia fue prácticamente imposible, y mucho más conseguir operadores gastronómicos dispuestos a apostar por locales en planta baja. Recién un año después de la pandemia logramos cerrar con alguien. Pero el proyecto tenía sustancia. Yo tengo mi olfato: nuestra oficina estaba antes sobre República de Colombia. Me bajaba todos los días y pensaba que el centro era un lugar hermoso para hacer desarrollo inmobiliario. Caminaba por la zona, veía departamentos pequeños, copetines que vendían empanadas, estudios jurídicos, edificios corporativos chicos. Y pensaba: esto es Zenith, pero en altura. Es el centro, con eficiencia. Respirás el centro en Zenith. No fue una idea importada, ni mística. Fue algo del lugar, algo que ya estaba ahí. Por eso creo que Zenith funciona. Ya inauguramos el segundo, y pronto vamos a lanzar un tercero. Porque hay algo en ese modelo —en esa mezcla de ciudad real con infraestructura pensada para la vida contemporánea— que responde a lo que la gente realmente necesita. ¿Qué rol juega la arquitectura en la propuesta de valor de AZ Inversiones? ¿Lo consideran un diferenciador real en el contexto del mercado paraguayo? Depende de qué parte de la arquitectura hablemos. Yo creo que la arquitectura, para nosotros, juega un valor determinante. Pero no tanto desde el punto de vista de la fachada. O sea, sí, es importante que tu proyecto sea lindo. Pero está lejos de ser lo más importante. Para nosotros, algo mucho más importante es, desde la arquitectura, la optimización de los metros cuadrados. Las áreas comunes, la distribución de los departamentos, cómo va a ser tu área social, cuál va a ser el retiro del edificio... esas cosas son las que impactan directamente en la calidad de vida del usuario. Por ejemplo, en este edificio tuvimos que aumentar un metro más el retiro para dejar ese árbol gigantesco que está ahí. Y eso también es arquitectura. No es solo decir "hago más retiro porque sí", sino decidir mantener el árbol. Entonces, esos metros cuadrados los redistribuimos hacia arriba, optimizando el resto del proyecto. Y en la distribución también somos muy cuidadosos. Para mí, el living siempre tiene que estar conectado con el balcón. El comedor, con la cocina. No puede ser que uno tenga que estar peleando el paso de un espacio a otro. Hoy los departamentos tienen metros cuadrados justos. Esa es la realidad, eso es lo que nos espera. Por eso es clave que cada metro cuadrado esté bien aprovechado. Y también que el proyecto en sí tenga amenities realmente usables. Tratamos de evitar los metros de pasillo, los laterales con mucho balconeo que después nadie usa. Porque todo eso termina afectando directamente al bolsillo del usuario: hay que limpiar, hay que mantener, y si no se usan, terminan siendo grasa para el proyecto. Nosotros tratamos de sacar esa grasa y dejar solo lo más rico del asado. Que el proyecto sea eficiente. Eso es positivo tanto para el inversor como para el usuario final. ¿Cómo evalúan hoy el acceso al financiamiento en Paraguay, tanto desde la óptica del desarrollador como desde la del inversor o comprador? Sigue siendo escasa. Sí fue mejorando bastante, obviamente. Pero también deberíamos sincerarnos con las tasas. Las tasas que tenemos hoy no son tasas para nuestra gente. Terminan pagando demasiado. Y hay muchos costos ocultos detrás de los intereses, detrás de las tasas, que uno termina pagando mucho más de lo que tuvo la expectativa de pagar. Entonces, tenemos que sincerarnos con las tasas de las entidades financieras. Yo puedo financiar con una tasa competitiva, pero tampoco soy una entidad bancaria. Entonces puedo llegar hasta cierto punto. Y después las entidades bancarias son las que pueden llegar al volumen. Pero como los bancos son una de las entidades más prolíficas del país, y hay una fuerte competencia también bancaria, también desde su punto de vista es difícil. Porque la competencia entre ellos también es cargada. Entonces, si vemos desde todos los ángulos, es algo que naturalmente se va a ir madurando. Y naturalmente, pues las tasas van a ir bajando. Pero falta todavía. Por un lado está la burocracia para la adquisición de créditos, que va de la mano también con que mucha gente no califica. Promovido también por la informalidad que hay en el país. Si alguien está peleando por llegar a fin de mes, ¿cómo le puedo decir que tiene que facturar y pagar su renta? Hay un montón de cosas que van sumando a la ecuación. Y después, a medida que el mundo bancario va haciendo sinergia, y se van uniendo entre bancos, van a ir bajando expectativas. Porque ya van a tener la cuota del mercado más grande. Entonces van a tener que colocar más dinero y naturalmente van a ir bajando las tasas. Antes había muchos más bancos. Y hoy cada vez hay menos. Pero son más grandes. Y eso ya es algo que indica una maduración del mercado. Entonces ¿está mejor que antes? Sí. ¿Falta? Muchísimo. ¿Vamos a llegar? Probablemente vamos a llegar por el camino. ¿Creés que Paraguay ya está preparado para atraer capital extranjero a gran escala en el rubro inmobiliario? ¿Qué factores faltan para lograrlo? Están viniendo fondos. Pero vienen de la mano de los desarrollistas. Es un conjunto. Pero sí, vienen. Grandes capitales están viniendo. Este volumen de edificios que se está levantando no se sostiene solo con apoyo bancario local. Y lo mismo pasa con las ciudades que se están proyectando del otro lado del puente. No es que se van a construir de a uno. Eso se va a hacer con grandes capitales. Necesitás cientos de millones de dólares para hacer todos los proyectos que nosotros, los desarrollistas, estamos previendo para los próximos años. Entonces, en ese sentido, digo que sí: ya lo están haciendo. Quizás no es tan visible, pero ya están viniendo. Y capaz estamos viendo recién el comienzo de una película mucho más grande. Ahora, lo que falta para estructurar bien esos fondos es la seguridad jurídica. Eso es gravital. Hoy los fondos vienen de la mano de los desarrollistas porque ahí es donde encuentran esa seguridad jurídica. No es que vienen los fondos solos a instalarse y a decir "compro volumen de metros cuadrados". Vienen acompañando proyectos que ya tienen una estructura, una trazabilidad, un respaldo. Y creo que eso es lo principal que hay que entender: el capital extranjero ya está llegando, pero viene cuando hay confianza, cuando hay estructura detrás. No va a venir solo por el potencial. Necesita reglas claras. Y finalmente ¿Cómo imaginás el mercado inmobiliario paraguayo en los próximos diez años? O sea... primero que nada, yo podría estimar el doble de volumen de proyectos en diez años. Podría estimar el doble de lo que tenemos ahora. Nosotros también vamos a seguir creciendo. No sé si el doble, quizás un poco más prudentes. Pero me animo a decir que, dentro de todo, fuimos uno de los que más rápido crecimos al comienzo, pero también de los que más prudencia adoptamos en los últimos años. Va a crecer el doble en volumen de metros cuadrados. Y veo zonas nuevas emergiendo también. Como el centro de Asunción. O sea, yo soy un enamorado del centro. Pero no solo el centro, también zonas cercanas al centro. Más el centro de Asunción para gente que se fue afuera. Enfocado a ese público que vuelve a vivir en zonas donde antes vivían sus padres. Pero ya no en casas, sino en edificios en altura. En edificios con precios más accesibles. Nosotros, al comienzo, como había mucho campo... el campo te hace esparcirte. Esparcirte. Pero cuando tenés recursos limitados, eso te hace empezar a juntarte. Yo a veces veo al edificio como una madriguera de humanos. Antes, con muchos recursos, vivíamos cada uno por su lado, su rancho, su casa. Después te das cuenta que la laguna está acá nomás, el súper está acá, el colegio está acá... Entonces hacemos una madriguera acá. Para usufructuar mejor los servicios. Entonces, en vez de irme al campo, afuera, a Luque, donde no hay nada... trato de vivir acá. Y la única forma es hacer una madriguera, un edificio, y ahí hacer tu lugar para vivir. El centro no dejó de tener comercio. El centro sigue siendo un pueblo, pero para otra clase. Una clase media, incluso media-alta en algunos casos. Sigue abiendo bancos, sigue habiendo colegios, sigue habiendo shoppings, galerias, un montón de cosas.

  • Skyterra Paraguay Presenta Wave Houses: Casas de lujo en el exclusivo Aquabrava

    Skyterra Paraguay ha revolucionado el mercado inmobiliario con el reciente lanzamiento de su ambicioso proyecto Wave Houses en el exclusivo barrio privado Aquabrava, ubicado en Altos, a tan solo 47 kilómetros de Asunción. Este innovador desarrollo se distingue no solo por su enfoque de lujo y exclusividad, sino también por ser el primer barrio en Paraguay en incorporar una Laguna Cristalina con tecnología de olas Wavetech, una característica única que eleva la propuesta de valor de la comunidad. Este lanzamiento, que tuvo lugar ayer en el Centro de Experiencias de Raíces Real Estate, contó con la presencia de importantes inversores nacionales e internacionales, quienes pudieron conocer de primera mano las ventajas y el potencial de inversión que ofrece el proyecto. Skyterra ha organizado un tour exclusivo para inversores extranjeros del 16 al 18 de octubre. Los participantes podrán explorar oportunidades de inversión en Paraguay y visitar desarrollos de Raíces Real Estate, con énfasis en Aquabrava, un barrio cerrado de lujo. Aquabrava se destaca por su Laguna Cristalina, que utiliza la tecnología Wavetech para generar olas controladas, permitiendo actividades como surf y paddle surf en un entorno privado y seguro. El proyecto Wave Houses, comercializado en exclusiva por Sotheby's International Realty, contempla la construcción de al menos 10 casas de lujo en un plazo de tres años. Estas viviendas estarán distribuidas estratégicamente dentro del barrio cerrado, en lotes de 650 m°, garantizando a los propietarios no solo privacidad, sino también vistas privilegiadas a las áreas verdes y la laguna. Cada casa contará con 300 m° de construcción, distribuidos en dos plantas que incluyen: Planta Baja: Un garaje semicubierto con capacidad para dos camionetas y dos autos, además de amplios espacios abiertos que integran el living, comedor y cocina. También se incluyen una sala de juegos o family room, un escritorio o cuarto de huéspedes en suite, un toilette, cuarto de servicio con baño, lavadero, y una amplia galería con parrilla que da al jardín, donde se encuentra una piscina privada y un baño exterior, ideal para reuniones sociales y familiares. Planta Alta: Aquí se ubica la master suite, equipada con vestidor y baño completo, que ofrece un espacio de descanso y lujo. Además, se incluyen dos habitaciones en suite, lo que garantiza la comodidad de todos los integrantes de la familia o invitados. El precio inicial de estas propiedades es de 450.000 dólares, incluyendo el lote, aunque el valor puede variar en función de las personalizaciones que el cliente elija. El costo final dependerá de los materiales, acabados y metraje de la casa, brindando flexibilidad a los compradores para adaptar el diseño a sus preferencias. Se espera que las primeras unidades estén listas para su entrega a finales del próximo año, coincidiendo con la apertura de la Laguna Cristalina con olas, uno de los principales atractivos del barrio. Wave Houses ofrece más que viviendas de lujo, respondiendo a la demanda de familias que buscan un refugio de fin de semana en un entorno natural con comodidades modernas. Aquabrava destaca con una playa artificial de 9.000 m², tres lagunas, áreas deportivas y un exclusivo Club House con bar y restaurante. Su tecnología Wavetech, que crea olas controladas en la laguna, lo convierte en un destino único en Paraguay para vivir y disfrutar de actividades acuáticas, combinando lujo, comodidad y naturaleza. Lanzamiento de Wave Houses en el Centro de Experiencias de Raíces Real Estate El diseño de las Wave Houses se distingue por ser de vanguardia, lo que marca una diferencia importante en este desarrollo. Cada casa cuenta con terminaciones de alta calidad y de muy buen gusto, que se combinan con una funcionalidad excepcional, un aspecto clave que ha sido cuidadosamente pensado en la conceptualización del proyecto. Según los desarrolladores, "al fin y al cabo, estas son casas donde las personas pasarán sus vacaciones y fines de semana", por lo que la funcionalidad y el diseño deben estar perfectamente conjugados para brindar una experiencia de vida superior. Esta combinación de vanguardia y practicidad asegura que las residencias no solo luzcan estéticamente impresionantes, sino que también sean cómodas y prácticas para sus habitantes. Skyterra Paraguay, empresa responsable del proyecto, cuenta con más de 15 años de experiencia en el mercado inmobiliario, tanto en Paraguay como en Argentina. Especializada en desarrollos residenciales y comerciales de alta gama, la compañía se ha consolidado como un actor clave en la transformación del paisaje urbano de Asunción y Buenos Aires. La visión de Skyterra se enfoca en ofrecer proyectos que combinan tecnología de vanguardia, diseño moderno y una funcionalidad impecable, cualidades que se reflejan plenamente en el proyecto Wave Houses. Estas casas están diseñadas para ser el refugio ideal para los fines de semana y vacaciones, donde la funcionalidad y el diseño se unen para ofrecer una experiencia de vida única. Aquabrava, desarrollado por Raíces Real Estate, cubre 65 hectáreas y cuenta con 463 lotes en cuatro barrios privados. Además de casas y lotes residenciales, incluye macrolotes para edificios de departamentos, ofreciendo una comunidad integral que combina naturaleza, seguridad y comodidades modernas. La comercialización de las 10 primeras Wave Houses estará a cargo de Sotheby's Paraguay, una de las firmas inmobiliarias más prestigiosas a nivel mundial, garantizando que las propiedades lleguen al público adecuado y mantengan su estatus de exclusividad. Skyterra también tiene planeada una segunda fase de desarrollo que incluirá más viviendas, una vez finalizada la primera etapa, lo que refuerza su compromiso con el crecimiento sostenido del proyecto. El éxito del lanzamiento de Wave Houses reafirma la posición de Skyterra y Raíces Real Estate como líderes en la oferta de residencias de lujo en Paraguay, un mercado que continúa creciendo y atrayendo tanto a inversores locales como extranjeros. Este proyecto no solo marca un hito en la oferta inmobiliaria del país, sino que también ofrece una nueva forma de vivir, donde la exclusividad, la innovación y la conexión con la naturaleza son los pilares fundamentales. Para más información completa el siguiente formulario y la desarrolladora se contactará con usted:

  • Comienzan las obras de Civis XI: Un Nuevo Ícono de Altura Para el Skyline de Asunción

    Ubicado en el corazón del Barrio Las Lomas, a pasos de Civis X, el nuevo desarrollo de la marca se proyecta como uno de los edificios más altos y completos del país, reafirmando la apuesta por una ciudad vertical, conectada y sostenible. Andrés Martí, Gerente Comercial de Civis; José Serratti, Accionista y Director Jurídico de Civis; y Diego Vuyk, Director Ejecutivo de Codas Vuyk Este miércoles se llevó a cabo la palada inicial de Civis XI , marcando el inicio de una nueva obra emblemática para el skyline de Asunción. Ubicado sobre la Avenida San Martín casi Agustín Pío Barrios, en el corazón del exclusivo Barrio Las Lomas y a escasos 150 metros del edificio hermano, Civis X, este nuevo desarrollo de usos mixtos consolida una visión urbana clara: construir una ciudad más vertical, más eficiente, más conectada. El acto simbólico fue encabezado por el Accionista y Director Jurídico de la firma, José Serratti, y por el Gerente Comercial Andrés Martí, junto a los directivos de la constructora Codas Vuyk, responsables de la ejecución de la obra. El proyecto encarna una visión integral que combina diseño, innovación, sostenibilidad y una nueva forma de habitar la ciudad, consolidando además el posicionamiento de la marca como referente en desarrollos de gran escala en Paraguay. Con más de 140 metros de altura y 196 unidades residenciales, Civis XI se posiciona entre los edificios más altos y completos del país. La torre incorpora un mix tipológico que incluye monoambientes, departamentos de uno y dos dormitorios, unidades lock-off y mini penthouses, integrando así una propuesta flexible que responde tanto a la demanda de inversión como a las nuevas formas de habitar la ciudad. En su base, se desplegará un restaurante en planta baja y más de 1.450 m² de áreas comunes diseñadas bajo un concepto de bienestar integral. El proyecto contará con un parque elevado natural con vegetación nativa, múltiples piscinas, espacios para juegos al aire libre, gimnasios interiores y exteriores, áreas de relajación como spa, saunas y jacuzzi, además de amenities como business center, cine, sala de masajes, peluquería y un espacio ecuménico. A esto se suma una batería de servicios integrados que van desde limpieza, lavandería y gestión de residuos hasta cargadores eléctricos, inflado de neumáticos y movilidad alternativa para residentes con bicicletas y monopatines eléctricos. Uno de los pilares centrales del proyecto es la sostenibilidad. Siguiendo la línea trazada en sus desarrollos anteriores, Civis XI apunta a obtener la certificación EDGE, un estándar internacional que promueve la eficiencia en el uso de agua, energía y materiales. La incorporación de paneles solares, la gestión responsable de residuos y la elección de vegetación autóctona son parte de esta apuesta consciente, que busca posicionar a Civis XI como uno de los pocos edificios certificados del país y como un referente nacional en responsabilidad ambiental. De manera complementaria, Civis avanza en el desarrollo de una aplicación móvil que conectará a los usuarios de sus distintos edificios. La plataforma contará con dos versiones: una orientada a residentes, quienes podrán gestionar reservas de amenities, realizar reclamos y acceder a beneficios con locales y servicios de la zona; y otra pensada para propietarios, que brindará un tablero económico integral con datos sobre rendimiento de sus unidades, expensas y facturación. Esta iniciativa tecnológica será lanzada oficialmente junto a Civis Mariscal, previsto para febrero del 2026, y refleja la voluntad de la marca de generar comunidades inteligentes, interconectadas y autogestionables. El respaldo del mercado a la propuesta de Civis XI es evidente: con más del 90% de las unidades ya comercializadas, el proyecto ha tenido una recepción sobresaliente. Tanto inversores como usuarios finales han apostado por esta nueva obra, consolidando no solo la reputación de la marca, sino también la confianza en el potencial del mercado inmobiliario paraguayo. Según indicaron desde la empresa, las ventas han atraído capitales provenientes de América Latina, Europa y Asia, una muestra clara del atractivo creciente que tiene Paraguay en el mapa regional. Civis XI se convierte así en el undécimo proyecto lanzado por la desarrolladora, que a menos de ocho años de su fundación ya ha entregado cinco edificios, tiene seis en obra y suma más de 900 unidades vendidas y 70.000 metros cuadrados comercializados. Este nuevo rascacielos representa también su segundo edificio de gran altura en menos de seis meses, y junto a Civis X, supone una inversión combinada cercana a los 30 millones de dólares , lo cual evidencia tanto la madurez operativa del equipo como la capacidad de planificación en simultáneo de proyectos de gran escala. Desde Civis, destacan que el crecimiento de la empresa refleja no solo un momento de expansión, sino una visión urbana de largo plazo. La verticalización de Asunción, la consolidación de corredores estratégicos y la demanda de viviendas con servicios integrados muestran una transformación profunda en la manera de proyectar y vivir la ciudad. La cercanía de un nuevo lanzamiento, a menos de 500 metros del actual terreno de obra, confirma que la marca continuará apostando fuerte por esta zona en particular. Con un modelo de negocio basado en la eficiencia, el diseño y la sostenibilidad, Civis no solo construye edificios: construye comunidad, ciudad y una nueva narrativa para el desarrollo urbano en Paraguay. Quienes deseen sumarse a esta propuesta aún tienen la posibilidad de adquirir una de las unidades disponibles, con precios competitivos y entrega garantizada. Los interesados pueden completar el formulario de contacto para recibir más información directamente por parte de la desarrollador:

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